El fin del imperio Español

Durante el año 1898 en España se dio uno de los sucesos más decisivos de su historia. Dicho es el denominado desastre de 1898 en el que España perdió las últimas colonias de Cuba, Puerto Rico, Filipinas. La repercusión de dichas pérdidas no solo fueron consecuencias económicas sino también de carácter políticos y cultural. Cierto es que la pérdida de Cuba, Puerto Rico y Filipinas tuvo visibles consecuencias económicas en determinados sectores, pero no fueron de carácter general en el país.

En los ojos de muchos economistas dicho desastre fue el comienzo de una decadencia que finalizaría con la Guerra Civil la cual supuso un antes y un después en nuestro país el cual se vio inmerso en una dictadura que tendría fin en el año 1975.

El desastre tuvo comienzo en Cuba con la sublevación de Marti, la cual contaba con el apoyo político y financiero de EEUU dicha tuvo una duración corta.

Ante la sublevación la respuesta de España fue mandar 200000 españoles que antes su incapacidad para pagar 1500 pesetas tuvo que ejercer el servicio militar. El conflicto finalizó, con la declaración de guerra por parte de los estadounidenses a causa del hundimiento del buque de Main en aguas cubanas. La fuerza naval de EEUU fue demasiado para España que se vio obligada a firmar el Tratado de Paz de París donde se declaraba la independencia de Cuba y la cesión a EEUU de Puerto Rico y Filipinas poniéndole así fin al imperio español que tan solo conservaría Guinea Ecuatorial.

Posterior a la trágica derrota y pérdidas de las últimas colonias españolas brota un descontento social de frustración, desesperanza que dio lugar a un grupo de pensadores entre los que se encontraban Miguel de Unamuno, Antonio Macha o Pío Baroja entre otros denominada la Generación del 98 los cuales se vieron sumamente afectados por la situación moral, política en la que encontraba España Inmersa.

Dentro de España aumentaron los nacionalismos como respuesta a los ataques tolerados por potencias extranjeras. Estas fueron algunas de las principales consecuencias del desastre del 98 en España.

Respecto a la política exterior las consecuencias fueron principalmente el desprestigio militar y la liquidación de los restos del imperio colonial ultramarino. El desprestigio militar derivado de la derrota mostró la falta de preparación de las fuerzas armadas para el conflicto ocurrido.